Pese a las corrientes de aire que habrá que padecer al conducirlo, sin duda compensará por las emociones y satisfacciones que nos proporcionará. Aunque matriculable es un vehículo concebido para correr y mucho, por lo que solo en circuito podremos sacarle todo el jugo, y con un precio «asequible». Si tienes un vecino vacilón que presume de GT3 o de Aston Martin y quieres hacerle morder el polvo este es tu coche.
Lo mismo que su hermano Atom, pero en el campo, y salvo que tu vecino tenga un Bowler del que presumir, no hay nada que demostrar
